Si os preguntaran qué animal es el más peligroso del mundo, seguramente lo primero que os vendría a la mente serían imágenes de grandes carnívoros, como por ejemplo los leones de África, o el tiburón blanco. Sin embargo, el animal que provoca más muertes humanas al año es mucho más pequeño, y con frecuencia perturba el sueño de muchos de nosotros con su característico zumbido en mitad de la noche, haciéndonos encender la luz y buscarlo por la habitación. Imagino que a estas alturas ya habréis adivinado que se trata del mosquito, en concreto de la hembra de mosquito, pues son ellas las que necesitan tomar sangre para poner sus huevos.
Mapa de distribución del mosquito tigre Aedes albopictus en Europa. Mapa realizado por la ECDC y la EFSA el 16 de Enero de 2019. Datos presentados por VectorNet project.
Aunque lo que provoca la muerte a tantos seres humanos son los diferentes patógenos que los mosquitos son capaces de transmitir, incluyendo protozoos, como Plasmodium falciparum (causante de la malaria) y numerosos arbovirus (virus transmitidos por artrópodos, arthropod borne virus en inglés). Estos no solo afectan a los seres humanos, como el virus del Dengue (que afecta cada año a más de 500 mil personas sólo en América), sino también al ganado y a la fauna silvestre como el virus del Nilo Occidental, que afecta tanto a caballos como aves. La transmisión de estos virus empieza cuando una hembra de mosquito se alimenta sobre una persona o animal infectado con el virus. El virus llega al estómago del mosquito infectándolo y, tras atravesar la pared del estómago se dispersa por todo su organismo, llegando a las glándulas salivares y siendo transmitido al próximo huésped cuando el mosquito se alimenta sobre otra persona o animal.
Factores asociados al cambio global como son el cambio climático y la alteración del hábitat, junto con las invasiones biológicas, han contribuido al aumento de estas enfermedades víricas de relevancia para la salud humana. Además, el incremento en la frecuencia de viajeros procedentes de áreas donde estos virus son endémicos favorece la dispersión de estas enfermedades a lo largo de todo el planeta. Ello hace que estos virus transmitidos por mosquitos sean considerados hoy en día por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como uno de los principales problemas de salud global, dado el número de muertes que provoca y el significativo impacto que producen en la economía de las localidades donde son endémicos. Y es que hay que tener en consideración que los mosquitos se encuentran distribuidos en casi todos los rincones del planeta con excepción de la Antártida, lo cual provoca que más de 3 billones de personas vivan en zonas infectadas por mosquitos. Un claro ejemplo de la repercusión de estos virus fue el brote de Zika que tuvo lugar en 2016 en Suramérica, transmitido por las especies de mosquitos Aedes aegypti y Aedes albopictus principalmente, y que afectó a cientos de recién nacidos provocándoles microcefalias. Se llegó incluso a plantearse la suspensión de un evento deportivo de tal magnitud como los Juegos Olímpicos de Brasil.
Diferencias taxonómicas entre los mosquitos Aedes albopictus y Aedes aegypti. Fuente: Mosquito Alert. Autor Ilustración: J. Luis Ordoñez.
Aunque en Europa no está distribuida la especie Aedes aegypti, la introducción en Europa de Aedes albopictus y su posterior expansión por los países de la cuenca mediterránea – como Italia, Francia, España -, sumado al aumento en la frecuencia de viajeros procedentes de países donde estos virus, junto con otros como el virus del Dengue o virus de la Fiebre Amarilla donde son endémicos; ha provocado que se hayan producido los primeros casos de transmisión local de Dengue en Francia y España y de Chikungunya en Francia e Italia.
Ciclo de transmisión del virus del Nilo Occidental
Pero no todas las especies de arbovirus son transmitidos por mosquitos, existiendo otros que pueden ser transmitidos por garrapatas o por Culicoides, como por ejemplo el virus de la Lengua Azul que afecta al ganado bovino. Además, dentro de los arbovirus transmitidos por mosquito, no todos son transmitidos con igual eficacia por los mosquitos, sino que su capacidad de transmisión varía considerablemente. Mientras que los virus del Dengue, Zika, Chikungunya y Fiebre amarilla son transmitidos por mosquito del género Aedes, otros virus como el virus del Nilo Occidental o el virus Usutu son transmitidos principalmente por el mosquito común Culex pipiens. Pero además, existen otros factores que también van a influir en la capacidad de transmisión de estos virus por los mosquitos, observándose variabilidad entre las poblaciones. Estas diferencias pueden ser debidas a factores genéticos asociados al mismo mosquito y al virus, o también a factores externos como puede ser por ejemplo la interacción entre los virus con bacterias del microbiota del mosquito. Esta falta de conocimiento en las interacciones entre huésped vertebrado, mosquito y virus, hace fundamental la realización de estudios multidisciplinares para comprender mejor la dinámica de transmisión y epidemiología de los arbovirus.